lunes, 5 de agosto de 2013

¿Definición del pecado?


¿Definición del pecado?

Hablar sobre el Pecado podría llevarnos mucho tiempo, ya que es tan amplio y extenso este tema pero con la ayuda de Dios, como siempre,  haremos un breve análisis del mismo.

 El pecado es descrito en la Biblia como la trasgresión a la ley de Dios (1 Juan 3:4) y rebelión contra Dios (Deuteronomio 9:7; Josué 1:18). El pecado tuvo su origen con Lucifer, el “Lucero, hijo de la mañana”, el más hermoso y poderoso de los ángeles. No contento con ser todo esto, el deseó ser semejante al Dios altísimo, y esa fue su caída y el inicio del pecado (Isaías 14:12-15). Cambiado su nombre a Satanás, él trajo el pecado a la raza humana en el Jardín del Edén, donde tentó a Adán y Eva con la misma seducción - “...seréis como Dios...” Génesis 3 describe su rebelión contra Dios y contra Sus mandamientos. A partir de ese momento, el pecado ha pasado a través de todas las generaciones de la raza humana, y nosotros como descendientes de Adán, hemos heredado las consecuencias del pecado de él. Romanos 5:12 nos dice que a través de Adán, el pecado entró al mundo, así que la muerte pasó a todos los hombres, porque “la paga del pecado es muerte...” (Romanos 6:23).

Existe un tipo de pecado que es muy particular  es  conocido como Pecado Imputado. La palabra en griego traducida como  imputación  significa tomar algo que pertenece a alguien y acreditarlo a la cuenta de otro. Antes que fuera dada la Ley de Moisés, el pecado no era imputado al hombre, sin embargo aún así los hombres eran pecadores porque heredaron el pecado. Después que la Ley fue dada, los pecados cometidos en violación a la Ley fueron imputados (acreditados) a ellos (Romanos 5:13). Aún antes que las transgresiones de la Ley fueran imputadas al hombre, la paga por el pecado (la muerte) continuó reinando (Romanos 5:14). Todos los humanos, desde Adán hasta Moisés, estuvieron sujetos a muerte, no por sus acciones pecaminosas contra la Ley Mosaica (la cual aún no tenían), sino por su propia y heredada naturaleza pecaminosa. Después de Moisés, toda la humanidad estuvo sujeta a muerte tanto por las consecuencias del pecado heredado de nuestros primeros padres, como también  por el pecado imputado como resultado de  violar una y otra vez las leyes que nos impuso Dios.

Dios usó este principio de imputación para beneficio de la raza humana, cuando Él imputó el pecado de los creyentes a la cuenta de Jesucristo, quien pagó la pena por el pecado (la muerte) en la cruz. Imputando nuestro pecado a Jesús, Dios lo trató como si Él fuera un pecador, aunque Él nunca lo fue, y lo hizo morir por los pecados de todos aquellos que creyeran en Él.

¿Qué son los siete pecados mortales?

Mucha gente teme una lista de siete pecados que supuestamente Dios no perdonará. Esta lista es conocida como los “siete pecados capitales” ¿Es bíblica la idea de los “siete pecados capitales”? Sí y no. Proverbios 6:16-19 dice: “Seis cosas aborrece Jehová, y aún siete abomina su alma. (1) Los ojos altivos, (2) la lengua mentirosa, (3) las manos derramadoras de sangre inocente, (4) el corazón que maquina pensamientos inicuos, (5) los pies presurosos para correr al mal, (6) el testigo falso que habla mentiras, y (7) el que siembra discordia entre hermanos.” Sin embargo, esta lista no es lo que la mayoría de la gente entiende como los “siete pecados mortales.”

Mucha gente cree que la lista de los “siete pecados capitales” es: soberbia, envidia, gula, lujuria, ira, avaricia y pereza. Aunque indudablemente cada uno de estos son pecados, en la Biblia nunca es dada tal descripción de los “siete pecados capitales”. La lista tradicional de los “siete pecados capitales” puede funcionar como una buena manera de clasificar muchos diferentes pecados existentes.

¿Qué es pecado de muerte?

1 Juan 5:16 es uno de los versos más difíciles en el Nuevo Testamento. “Si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida.” De todas las interpretaciones que han surgido, ninguna parece responder a todas las preguntas concernientes a este verso. Esta mejor interpretación puede encontrarse comparando este verso con lo que les sucedió a Ananías y Safira en Hechos 5:1-10 (ver también 1 Corintios 11:30). El “pecado de muerte” es un pecado deliberado, consciente, continuo, y falto de arrepentimiento. Dios, en Su gracia, permite que Sus hijos pequen sin castigarlos de inmediato. Sin embargo, llega un punto cuando Dios, ya no puede permitir que un creyente continúe pecando sin arrepentirse. Cuando se alcanza este punto, algunas veces Dios decide castigar a un cristiano, aún al punto de quitarle la vida aunque esto parezca difícil de creer.

Eso fue lo que hizo en Hechos 5:1-10, y 1 Corintios 11:28-32. Tal vez esto es lo que Pablo describe a la iglesia de Corinto en 1 Corintios 5:1-5. Debemos orar por cristianos que están pecando. Sin embargo, puede llegar el momento cuando Dios ya no escuche las oraciones por un creyente pecador a quien Él ya ha considerado necesario juzgar. Es difícil comprender que hay veces cuando ya es demasiado tarde para orar por una persona. Dios es bueno y justo, y sólo tendremos que dejarle a Él la decisión de cuándo es demasiado tarde y confiar en Su juicio.


¿Qué es el pecado imperdonable?

El caso del “pecado imperdonable” o “la blasfemia contra el Espíritu Santo” es mencionado en el Nuevo Testamento en Mr. 3:22-30 y Mateo 12:22-32. El término “blasfemia” en términos generales puede ser definido como una “irreverencia desafiante.” Aplicaríamos el término a pecados tales como maldecir a Dios o degradar voluntariamente las cosas relativas a Él. También lo es el atribuir maldad a Dios, o negar algún bien que debamos atribuirle a Él. Sin embargo, este caso de blasfemia, es uno específico, llamado “la blasfemia contra el Espíritu Santo” en Mateo 12:31. En esta cita, los fariseos, habiendo sido testigos de pruebas irrefutables de que Jesús estaba realizando milagros en el poder del Espíritu Santo, en vez de reconocerlo, aseguraban que Él estaba poseído por el demonio “Beelzebú(Mt. 12:24). En (Mr. 3:30), Jesús es muy específico acerca de lo que hicieron exactamente para haber cometido “la blasfemia contra el Espíritu Santo de Dios.” definiendolo asi por lo grave que es

Entonces, esta blasfemia tiene que ver con acusar a Jesucristo (en persona, en la Tierra) de estar poseído por el demonio. Hay otras maneras de blasfemar contra el Espíritu Santo (tales como mentirle, como en el caso de Ananías y Safira en Hechos 5:1-10), pero la acusación contra Jesús fue la blasfemia que era imperdonable. Este pecado imperdonable contra el Espíritu Santo, no puede ser duplicado en la actualidad, porque Jesucristo ya no está en el mundo, por lo menos en sentido físico porque al resusitar ascendió al cielo y se encuentra  sentado a la diestra de Dios.

En la actualidad el único pecado imperdonable en la actualidad, es el de una incredulidad sostenida. No hay perdón para la persona que muera en la incredulidad. Juan 3:16 nos dice, “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” La única condición para que alguien no sea perdonado es si él/ella no está entre los “todo aquel que en Él cree.” Jesús dijo, “Yo soy el camino, y la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por Mí.” (Juan 14:6). El rechazar la única forma de salvación es condenarse a sí mismo a una eternidad en el infierno, y el haber rechazado el único perdón, resulta obviamente un pecado que es totalmente imperdonable.

Mucha gente teme haber cometido algún pecado que Dios no perdona ni perdonará y sienten que no hay esperanza para ellos, sin importar lo que hagan. Nada le gustaría más a Satanás, que mantenernos trabajando bajo este malentendido. La verdad es que si una persona tiene este temor, él/ella sólo necesita venir ante Dios, confesar ese pecado, arrepentirse, y aceptar la promesa del perdón de Dios. “Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.” (1 Juan 1:9

Finalmente se hara mención  del Pecado Personal, Este es aquel que es cometido día tras día por el ser humano. Por haber heredado la naturaleza pecaminosa de Adán, cometemos pecados individuales y personales – todos ellos, desde la aparentemente inocente mentirilla, hasta el homicidio. Aquellos que no han puesto su fe en Jesucristo deben pagar el castigo por estos pecados personales, así como por el imputado pecado de herencia  (No confundir con Ez.18;14 que habla del Pecado Individual).  Sin embargo, los creyentes han sido liberados de la condenación eterna del pecado (el infierno y la muerte espiritual). Ahora podemos elegir si cometer o no pecados personales, porque tenemos el poder de resistir al pecado a través del Espíritu Santo que mora dentro de nosotros, santificándonos y dándonos la convicción de nuestros pecados cuando los cometemos (Romanos 8:9-11).


Francis Suarez

Fuentes:
1-La biblia
2-Articulos sobre El Pecado de Muerte,
Y E Pecado Imperdonable realizados
Por Got.question.org




¿Por qué dice en 1Tm.2: 15 que la mujer se salvará engendrando hijos?




¿Por qué dice en 1Tm.2: 15 que la mujer se salvará engendrando hijos?

Cita ( 1 Tim. 2:15)


“Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia.”


Indudablemente una correcta interpretación nos lleva a la verdad, pero para lograrlo debemos estudiar la palabra santa de la biblia y pedir al Espiritu Santo de Dios que nos guie y nos muestre esa verdad. Dios quiere que tengamos una mejor comprensión de sus escrituras para poder madurar mas, y orientar a aquellos que lo necesitan.

La cita de (1 Tim. 2:15)  ¿que nos dice ?,  Los estudiosos de las Sagradas Escrituras (Teologos) insisten en la necesidad de considerar cada versículo dentro de su propio contexto y de la narración general de la Biblia. Si damos una hojeada a los versiculos anteriores, encontramos que el versiculo 13 está hablando de Adán y Eva, y el 14 la implicación del  juicio que caeria sobre ella como resultado de su pecado.

Es de conocimiento de todos que a consecuencia de la desobediencia de Adán y Eva se introdujo el pecado y con ello la muerte, juicio que incluyó a toda la creación (Rm.8:22), pero la Misericordia del Señor inmediatamente anunció la redención que llegaría por medio de la simiente de la mujer, es decir, el Dios de la Gloria se manifestaría en carne (1Tm.3: 16) entrando en el escenario de este mundo por medio de una mujer.

Gn.3: 15Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta (la simiente de la mujer) te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar”. En el evangelio de Lucas encontramos toda la genealogía de María hasta llegar al primer hombre, Adán. Aquí podemos apreciar el cuidado minucioso de Dios para preparar ese cuerpo humano de Su Hijo Eterno, porque el plan de la salvación fue trazado desde antes de la fundación del mundo (Ef.1:4-5).  

Gn. 3: 16 relata la sentencia de Dios sobre la mujer: “Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos”. Pero como hemos leído en el verso anterior, juntamente con este juicio, le anticipa que a pesar de sus dolores en sus preñeces, por medio de ella, la cual procreará hijos, llegaría el Mesías prometido a través de su simiente, y de esta forma  la salvación para ella y para todos los que acepten ese regalo divino. Osea aceptando a Cristo como su salvador.

Por tanto, cuando en 1Tm.2: 13-15 está hablando del juicio que cayó sobre la mujer y toda la raza humana, también está recordando que por medio de ella (su simiente) llegaría la salvación. Dios sentenció que la mujer tendría dolores en sus partos, pero juntamente con ese dictamen, está el anuncio glorioso de la salvación que llegaría a través de su simiente.

A esto se refiere cuando dice: “pero (pese a su condenación y dolores) se salvará engendrando hijos”. La salvación llegaría por medio de ella a todos los que acepten al Señor Jesucristo como su único y suficiente Salvador personal. Ella (no una, tampoco se refiere a la primera ni a la última, sino todas las mujeres, porque está hablando en termino genérico) fue utilizada por Dios, como un canal de bendición que desciende de lo alto, por medio de los hijos que han engendrado a través de las generaciones que Dios preparó para que Su Hijo Eterno fuera manifestado en carne.

Francis suarez

Fuente:
Trabajo de
 Jack Fleming