jueves, 25 de diciembre de 2025

Realmente nació Jesús un 25 de diciembre Qué dice La Biblia

 

Realmente nació Jesús un 25 de diciembre

Qué dice La Biblia



La respuesta corta es no. La Biblia no menciona ninguna fecha específica (ni día ni mes) para el nacimiento de Jesús. De hecho, la mayoría de los historiadores y estudiosos bíblicos coinciden en que es muy poco probable que haya nacido un 25 de diciembre.

Aquí te explico lo que sí dice la Biblia y por qué se eligió esa fecha:

 1. ¿Qué pistas da la Biblia?

Aunque no da una fecha, el Evangelio de Lucas ofrece detalles que sugieren que no era invierno:

 Los pastores al aire libre: Lucas 2:8 menciona que había pastores que "pernoctaban al raso y velaban por turno su rebaño". En la región de Belén, diciembre es una época de lluvias y frío intenso (a veces incluso nieve). Los pastores solían recoger a sus rebaños en establos durante el invierno; el hecho de que estuvieran afuera sugiere que era una época más cálida, como primavera o principios de otoño.

 El censo de César Augusto: El viaje de María y José a Belén fue para un censo (Lucas 2:1). Es poco probable que el Imperio Romano ordenara a la población viajar largas distancias a sus ciudades de origen en pleno invierno, lo que habría dificultado mucho la recaudación de impuestos y el movimiento de personas.

 2. ¿De dónde salió el 25 de diciembre?

La elección de esta fecha ocurrió siglos después del nacimiento de Jesús (alrededor del año 336 d.C.). Las razones principales fueron:

 Sustitución de fiestas paganas: En Roma se celebraba el Natalis Solis Invicti (el nacimiento del Sol Invicto) y las Saturnales durante el solsticio de invierno. La Iglesia eligió esta fecha para facilitar la conversión de los paganos, dándole un significado cristiano a una festividad que ya existía.  Es oportuno resaltar que era La Iglesia Católica Apostólica y Romana que imperaba (Oficial) con el apoyo del Emperador de turno.

Es importante señalar que en el año 336 d.C., el emperador romano era Constantino I, también conocido como Constantino el Grande, quien gobernó desde el 306 hasta su muerte en el 337, siendo una figura clave en la historia romana por su apoyo al cristianismo y la fundación de Constantinopla.

Gobernante único: Para el 336, Constantino había consolidado su poder como único emperador romano, tras años de luchas por el poder.

Conversión al cristianismo: Estaba en pleno proceso de integrar el cristianismo en el imperio, estableciendo formalmente la celebración de la Navidad en esa época, como menciona Britannica.

Nueva capital: Había fundado National Geographic Constantinopla (la antigua Bizancio) como su nueva capital en el 330 d.C., transformando el imperio.

Simbolismo religioso: Al ser los días más cortos del año cuando el sol "comienza a vencer a la oscuridad", se consideró apropiado para celebrar el nacimiento de Jesús, a quien la Biblia llama "la luz del mundo".

Cálculos teológicos: Algunos antiguos teólogos creían que las figuras importantes morían el mismo día que eran concebidas. Como calcularon la muerte de Jesús el 25 de marzo (Pascua), sumaron 9 meses de gestación y llegaron al 25 de diciembre.

 3. ¿Cuándo nació entonces?

No hay consenso, pero existen varias teorías basadas en otros eventos bíblicos:

Citas bíblicas clave sobre el nacimiento de Jesús:

Lucas 2:7-14 (NVI): "Y dio a luz a su hijo primogénito. Lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos. [...] Y de repente apareció una multitud de ángeles del cielo, que alababan a Dios y decían: «¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad!»".

 Mateo 2:1-2 (RVR1960): "Cuando Jesús nació en Belén de Judea, en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle".

En resumen, los evangelios nos dan los detalles del dónde y cómo, pero no el cuándo exacto en el calendario, dejando el misterio de la fecha para la tradición cristiana, que celebra la Navidad el 25 de diciembre.

Septiembre/Octubre: Basándose en el turno de servicio del sacerdote Zacarías (padre de Juan el Bautista) y el embarazo de su esposa Isabel, algunos calculan que Jesús nació en otoño, posiblemente durante la Fiesta de los Tabernáculos.

 Marzo/Abril: Otros apuntan a la primavera por la actividad de los pastores y la relación simbólica con el cordero pascual.

Jesús murió un Viernes Santo, según la tradición cristiana, y la fecha más aceptada por historiadores y teólogos, basada en los Evangelios, apunta al 3 de abril del año 33 d.C., en el calendario gregoriano, aunque también se maneja el 7 de abril del 30 d.C. como posible fecha exacta. 

Detalles Claves:

Día de la Semana: Viernes, conocido como el día de la preparación para el sábado judío (Sabbath).

Fecha Calendario Judío: El 14 o 15 de Nisán (dependiendo de si se toma el Evangelio de Juan o los Sinópticos).

Fecha Calendario Gregoriano: Aproximadamente el 3 de abril del 33 d.C., o en el 30 d.C.

En resumen, murió un viernes, previo al gran sábado de la Pascua judía, siendo el Viernes Santo la fecha en que la Iglesia recuerda este evento. Recuerde según la tradición de la Iglesia Católica.

 Ahora vamos a dejar de lado la tradición de la Iglesia Católica, y analizar según la realidad. El calendario judío (hebreo) es lunisolar y tiene entre 353 y 355 días en un año común, (10 días) menos que el nuestro que es solar. El judío tiene también  entre 383 y 385 días en un año bisiesto (o embolismal), que se produce siete veces en un ciclo de 19 años, añadiendo un mes extra (Adar II) para sincronizarse con las estaciones. Cada mes tiene 29 o 30 días, siguiendo el ciclo lunar, y el año bisiesto añade un mes completo para compensar la diferencia con el año solar.

Tipos de años en el calendario judío:

Año Común (12 meses): 353, 354 o 355 días.

Año Bisiesto (13 meses): 383, 384 o 385 días (un mes adicional llamado Adar II).

Características clave:

Lunisolar: Combina ciclos lunares para los meses y solares para el año.

Meses de 29 o 30 días: Para seguir la luna, los meses tienen 29 (como Cheshvan o Kislev) o 30 días (como Nisán o Tishrei).

Años bisiestos: Se añade un mes extra (Adar I) siete veces en un ciclo de 19 años para mantener las festividades en la estación correcta.

Inicio del año: El año nuevo, Rosh Hashaná, comienza en el mes de Tishrei (el séptimo mes), no en el primero.  Algo importante de mencionar es que el día judío se compone de (1 día) y (1 noche) . Te explico:

Sí,  basado en el relato bíblico de la Creación ("Y fue la tarde y la mañana, un solo día"), se cuenta de atardecer a atardecer, comenzando con la "tarde" (la noche) y seguida por la "mañana" (el día), por eso el Shabat empieza el viernes por la noche y termina el sábado por la noche. Este ciclo de noche-día define el inicio de cada jornada en el calendario hebreo, a diferencia del occidental que empieza a medianoche.

Características del día judío

Inicio: El día comienza con la puesta del sol, momento en que aparecen tres estrellas, marcando el fin del día anterior y el inicio del nuevo.

Duración: Las "horas" judías (horas temporales) varían según la estación, dividiendo el día en 12 horas nocturnas y 12 diurnas.

Ejemplo práctico: Si un evento importante ocurre un miércoles, pero anochece antes de que finalice el miércoles, ese evento ya se considera parte del día siguiente (jueves) en el calendario judío.

Días de ayuno: Los ayunos, como Yom Kipur, suelen empezar al anochecer del día anterior y duran hasta el anochecer del día marcado, siguiendo este patrón.

Pero recordemos esto, La cita bíblica de "tres días y tres noches" se encuentra en Mateo 12:40  donde Jesús dice que así como Jonás estuvo en el vientre del pez por tres días y tres noches, así el Hijo del Hombre (Jesús) estaría en la tierra. Esta frase es un paralelo con la experiencia de Jonás en el pez grande y se usa para señalar el tiempo que Jesús permanecería en la tumba antes de su resurrección.

La Cita Clave

Mateo 12:40 (RVR1960): "Porque así como Jonás estuvo en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches".

Interpretaciones y Contexto

La Señal de Jonás: Jesús usa la historia de Jonás (Jonás 1:17) como una profecía o "señal" de su propia muerte y resurrección.

Cálculo del Tiempo:

Literal (72 horas): Algunos interpretan que Jesús estuvo aproximadamente 72 horas en la tumba (miércoles tarde a sábado tarde) para cumplir las "tres noches y tres días" exactos, lo que implicaría una crucifixión el miércoles.

Según el Calendario Judío: Otros argumentan que, bajo el método judío de contar el tiempo (un día y una noche forman una "onah", y cualquier parte de una "onah" cuenta como un todo), Jesús podría haber estado desde la tarde del viernes hasta la mañana del domingo, incluyendo partes de tres días (viernes, sábado, domingo) y dos noches completas (viernes y sábado), cumpliendo la "señal".  Ambas equivalen a lo mismo y creo que es la correcta, no resucitó un domingo en la mañana como dice la tradición Católica, que piensa usted.

En resumen: La Biblia se enfoca en el porqué y el cómo nació Jesús, no en el cuándo. El 25 de diciembre es una fecha tradicional y simbólica, no una fecha histórica confirmada por las Escrituras.

 


domingo, 21 de diciembre de 2025

¿Creó Dios el mal?

 

¿Creó Dios el mal?

¿Creó Dios el mal?


De principio parecería que, si Dios creó todas las cosas, entonces el mal debe haber sido creado por Dios. Sin embargo, el mal no es una “cosa” como una roca o la electricidad. No puedes tener una jarra del mal. El mal no existe por sí mismo – realmente es la ausencia de lo bueno. Por ejemplo, los hoyos son reales, pero ellos solo existen en algo más. En donde no hay tierra se le llama hoyo, pero no puede estar separado de la tierra. Cuando Dios hizo la creación, es verdad que todo lo que creó era bueno. Una de las cosas buenas que Dios hizo fueron criaturas con la libertad de elegir el bien. Para hacer una elección real, Dios tuvo que permitir algo más que el bien para elegir. Así que Dios permitió a estos seres libres, tanto ángeles como humanos, elegir entre el bien y la ausencia de éste (el mal). Cuando existe una mala relación entre dos cosas buenas, le llamamos “el mal”, pero eso no lo convierte en una “cosa” que haya requerido la creación de Dios.

Tal vez la siguiente ilustración nos ayude. Si se le preguntara a una persona “¿existe el frío?” – su respuesta sería que sí. Sin embargo, esto es incorrecto. El frío no existe. El frío es la ausencia de calor. Similarmente, la oscuridad no existe, ésta es la consecuencia de la falta de luz. Igualmente, el mal es la ausencia del bien, o, mejor dicho, el mal es la ausencia de Dios. Dios no creó el mal, sino que más bien solo permitió la ausencia del bien.

Dios no creó el mal, pero Él lo permite. Si Dios no permitiera la posibilidad del mal, tanto ángeles como humanos servirían a Dios por obligación y no por decisión. Dios no quiso crear “robots” que simplemente hicieran lo que Él quería que hicieran mediante su “programación”. Dios permitió la posibilidad del mal para que podamos tener genuinamente la libertad de elegir si queremos servirle o no.

Nosotros como seres humanos finitos, jamás podremos entender a un Dios infinito (Romanos 11:33-34). Algunas veces pensamos que entendemos el por qué Dios está haciendo algo, solo para descubrir más tarde que era por diferentes propósitos de los que originalmente pensamos. Dios ve las cosas desde una perspectiva santa y eterna. Nosotros miramos las cosas desde una perspectiva pecaminosa, terrenal y temporal. ¿Por qué puso Dios al hombre en la tierra, sabiendo que Adán y Eva pecarían y traerían con ello el mal, la muerte y el sufrimiento para toda la raza humana? ¿Por qué no nos creó y nos dejó en el cielo donde seríamos perfectos y no tendríamos sufrimientos? Estas preguntas no pueden ser respondidas adecuadamente en este lado de la eternidad. Lo que podemos saber es que todo lo que Dios hace es santo y perfecto y finalmente lo glorificará. Dios tuvo que permitir la posibilidad del mal para nosotros, para darnos una verdadera opción de adorar o no a Dios. Dios no creó el mal, pero Él lo permite.




domingo, 14 de diciembre de 2025

¿Es realmente la Biblia la Palabra de Dios?

 

¿Es realmente la Biblia la Palabra de Dios?


El hecho de que Dios nos haya dado la Biblia es una prueba de Su amor por nosotros. Dios le comunicó a la humanidad cómo es Él y cómo podemos tener una relación correcta con Él. Estas son cosas que no podríamos haber sabido si Dios no nos las hubiera revelado divinamente en la Biblia. La Biblia contiene todo lo que la humanidad necesita saber acerca de Dios para tener una relación correcta con Él.

¿Cómo podemos saber que la Biblia es la Palabra de Dios y no solo un buen libro? ¿Qué tiene de especial la Biblia que la distingue de todos los demás libros que se han escrito? ¿Hay alguna evidencia de que la Biblia sea verdaderamente la Palabra de Dios? Este tipo de preguntas deben examinarse seriamente. No hay duda de que la Biblia afirma ser la Palabra de Dios. Esto se ve en la recomendación de Pablo a Timoteo: "Desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden dar la sabiduría que lleva a la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra" (2 Timoteo 3:15-17).

Hay evidencias tanto internas como externas de que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios.

Evidencia interna de que la Biblia es la Palabra de Dios

Las evidencias internas son aquellas cosas dentro de la Biblia que dan testimonio de su origen divino. Una evidencia interna de que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios es su unidad. Aunque en realidad se trata de sesenta y seis libros individuales, escritos en tres continentes, en tres idiomas diferentes, durante un período de aproximadamente 1500 años, por más de 40 autores que provenían de diversos ámbitos de la vida, la Biblia sigue siendo un libro unificado de principio a fin, sin contradicciones. Esta unidad es única entre todos los demás libros y es evidencia del origen divino de las palabras que Dios inspiró a los hombres a escribir.

Otra evidencia interna que indica que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios son las profecías. La Biblia contiene cientos de profecías detalladas relacionadas con el futuro de varias naciones, ciertas ciudades y toda la humanidad. Otras profecías se refieren a la venida del Mesías, el Salvador de todos los que crean en Él. A diferencia de las profecías que se encuentran en otros libros religiosos o en los de hombres como Nostradamus, las profecías bíblicas son extremadamente detalladas. Hay más de trescientas profecías relativas a Jesucristo en el Antiguo Testamento. No solo se predijo Su linaje y el lugar donde nacería, sino también cómo moriría y que resucitaría. Simplemente, no hay ninguna forma lógica de explicar las profecías cumplidas en la Biblia, salvo citar su origen divino. No hay ningún otro libro religioso que contenga tantas profecías predictivas detalladas como la Biblia.

Una tercera evidencia interna del origen divino de la Biblia es su autoridad y poder únicos. Aunque esta evidencia es más subjetiva que las dos primeras, no es menos poderoso testimonio de que la Biblia es la Palabra de Dios. La autoridad de la Biblia es diferente a la de cualquier otro libro jamás escrito. Este poder se ve en la forma en que innumerables vidas han sido transformadas sobrenaturalmente. Ha sanado a drogadictos, liberado a homosexuales, transformado a vagabundos y mendigos, reformado a criminales empedernidos, reprendido a pecadores y convertido el odio en amor. La Biblia posee un poder dinámico y transformador que solo es posible porque es verdaderamente la Palabra de Dios.

Evidencia externa de que la Biblia es la Palabra de Dios

También hay evidencias externas que indican que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios. Una de ellas es la historicidad de la Biblia. Debido a que la Biblia detalla eventos históricos, su exactitud está sujeta a verificación como cualquier otro documento histórico. A través de evidencias arqueológicas y escritos extra bíblicos, los relatos históricos de la Biblia han demostrado una y otra vez ser exactos y verdaderos. De hecho, todas las pruebas arqueológicas y manuscritas que respaldan la Biblia la convierten en el libro mejor documentado del mundo antiguo. El hecho de que la Biblia registre con precisión acontecimientos históricamente verificables ayuda a corroborar su afirmación de ser la verdadera Palabra de Dios y respalda la confianza en otros asuntos que aborda.

Otra evidencia externa de que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios es la integridad de sus autores humanos. Al estudiar las vidas de los autores de las Escrituras, encontramos que eran honestos y sinceros. El hecho de que estuvieran dispuestos a morir, a menudo de forma atroz, por lo que creían, da testimonio de que estos hombres creían verdaderamente que Dios les había hablado. Los hombres que escribieron el Nuevo Testamento y muchos otros cientos de creyentes (1 Corintios 15:6) conocían la verdad de su mensaje porque habían pasado tiempo con Jesucristo después de que Él resucitara de entre los muertos. Ver al Cristo resucitado tuvo un impacto tremendo en ellos. Pasaron de esconderse por miedo a estar dispuestos a morir por el mensaje que Dios les había revelado. Sus vidas y muertes dan testimonio del hecho de que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios.

Otra evidencia externa de que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios es su indestructibilidad. La Biblia ha sufrido más ataques despiadados e intentos de destrucción que cualquier otro libro en la historia. Desde los primeros emperadores romanos como Diocleciano, pasando por dictadores comunistas y hasta los ateos de hoy en día, la Biblia ha resistido los constantes ataques de sus detractores. Sin embargo, perdura y sigue siendo hoy en día el libro más publicado en el mundo.

A lo largo de la historia, los escépticos han considerado la Biblia como mitológica, pero la arqueología ha confirmado su veracidad histórica. Los opositores han atacado sus enseñanzas por considerarlas primitivas y obsoletas, pero sus conceptos morales y legales han tenido una influencia positiva en las sociedades de todo el mundo. Sigue siendo atacada por la pseudociencia, la psicología y los movimientos políticos, pero sigue siendo tan verdadera y relevante hoy como lo era cuando se escribió por primera vez. Esto no debería sorprendernos. Después de todo, Jesús dijo: "El cielo y la tierra pasarán, pero Mis palabras no pasarán" (Marcos 13:31).

La Biblia, única entre los libros, ha transformado innumerables vidas y ha influido en culturas enteras. Después de examinar las pruebas, se puede decir sin lugar a dudas que Dios ha hablado y que, sí, la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios.

 

Agradecimientos a Gotquestions.Org  y Pinceladas Bíblicas por sus aportes al tema.

 

martes, 2 de diciembre de 2025

El Adulterio

 

Queridos hermanos en la Fe de Cristo y apreciados lectores, les he estructurado teológicamente un artículo sobre el adulterio desde la perspectiva bíblica, seguido por la lista de citas que lo sustentan.

El Adulterio


Una Perspectiva Bíblica sobre la Fidelidad, el Pecado y la Redención

 El matrimonio, según las Escrituras, no es simplemente un contrato social, sino un pacto sagrado diseñado por Dios para reflejar la relación entre Cristo y su Iglesia. Dentro de este diseño, la fidelidad sexual y emocional es la piedra angular. El adulterio, por tanto, se presenta en la Biblia no solo como una falta moral, sino como una ruptura profunda de este pacto divino.

1. El Mandamiento Original y la Santidad del Matrimonio

En el Antiguo Testamento, la prohibición del adulterio es absoluta. Es uno de los Diez Mandamientos, lo que subraya su importancia fundamental para la estabilidad de la sociedad y la familia. Dios estableció el matrimonio como una unión exclusiva de "una sola carne". Violar esa unión es atentar contra algo que Dios mismo ha unido. "Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios." (Hebreos 13:4)

2. Jesús eleva el estándar:  El Adulterio del Corazón

Mientras que la ley mosaica se centraba en el acto físico, Jesús radicalizó la comprensión de la fidelidad en el Sermón del Monte. Él enseñó que el adulterio comienza mucho antes del acto físico; comienza en la mente y en el corazón.

Jesús explica que mirar a otra persona con deseo codicioso ya constituye una infidelidad en el plano espiritual. Esto nos enseña que la fidelidad requiere custodia de nuestros pensamientos y ojos, no solo de nuestros cuerpos.

3. Las Consecuencias Devastadoras

La Biblia es realista sobre el daño que causa el adulterio. El libro de Proverbios advierte repetidamente que el adulterio:

 * Destruye la reputación.

 * Disipa la riqueza.

 * Corrompe el alma del que lo comete.

Más allá de lo social, existe una dimensión espiritual: el adulterio es a menudo usado por los profetas como una metáfora de la idolatría. Cuando el pueblo de Dios adoraba a otros ídolos, Dios los llamaba "adúlteros", porque habían roto sus votos de lealtad exclusiva a Él.

 

4. ¿Es el fin?   Gracia y Restauración

A pesar de la gravedad del pecado, la Biblia ofrece un camino de esperanza. El adulterio es causa legítima de divorcio según Jesús (por la "dureza del corazón" humano), pero no es el "pecado imperdonable".

En el encuentro de Jesús con la mujer sorprendida en adulterio, vemos el equilibrio perfecto de la gracia: no hay condenación, pero hay un mandato de transformación ("Vete, y no peques más"). El Rey David, quien cometió adulterio y asesinato, fue restaurado cuando se arrepintió genuinamente (Salmo 51), aunque tuvo que enfrentar consecuencias terrenales por sus actos.

El adulterio es una herida profunda, pero el poder del Evangelio es suficiente para perdonar al pecador y, en muchos casos donde hay arrepentimiento mutuo, restaurar el matrimonio.

Lista de Citas Bíblicas Clave sobre el Adulterio

Aquí tienes las referencias bíblicas organizadas para tu estudio:

El Mandato y la Ley

 * Éxodo 20:14: "No cometerás adulterio." (El séptimo mandamiento).

 * Levítico 20:10: Establecía la gravedad y la pena capital en el contexto de la ley civil del antiguo Israel, demostrando cuánto detesta Dios la ruptura del pacto.

 * Proverbios 6:32: "Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace."

La Enseñanza de Jesús (Nuevo Testamento)

 * Mateo 5:27-28: "Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón."

 * Mateo 19:9: "Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casa con otra, adultera."

 * Juan 8:11: "Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más."

Advertencias Apostólicas

 * 1 Corintios 6:9-10: "¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros... heredarán el reino de Dios."

 * Hebreos 13:4: "Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla."

El Significado Espiritual

 * Santiago 4:4:Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios?" (Aquí se usa el término para describir la infidelidad espiritual hacia Dios).




lunes, 1 de diciembre de 2025

¿Postura de la Biblia sobre el suicidio, Parte II?

 

¿Postura de la Biblia sobre el suicidio,

Parte II?

Hablaremos nuevamente sobre el suicidio, ya que es un tema profundamente complejo y delicado que se cruza con la salud mental, la teología y el sufrimiento personal. En el contexto del cristianismo, la Biblia proporciona un marco para comprender la santidad de la vida, la naturaleza de la desesperación humana y la esperanza que ofrece la fe.

Desde las historias de personajes bíblicos que se enfrentaron a una profunda desesperación hasta las enseñanzas de Jesús sobre cómo encontrar descanso y paz en Él, la Biblia ofrece tanto consuelo como una llamada a buscar el apoyo divino en momentos de angustia.

Este artículo explora lo que la Biblia dice sobre el suicidio, explorando sus enseñanzas y con el objetivo de comprender si el suicidio es un pecado perdonable o un camino hacia la condenación.

Índice

¿Qué significa el suicidio?

¿Es el suicidio un pecado?

El suicidio en la Biblia

Siete suicidios y un intento.

¿Qué significa el suicidio?

Cuando una persona se quita la vida deliberada y voluntariamente, es una pérdida de vida devastadora. La idea suicida puede ocurrir por muchas causas diferentes, pero normalmente ocurre cuando:

El la angustia mental por la que están pasando es aplastante .No tienen ni idea de cómo recomponerse. 

Las manifestaciones de las ideas y la conducta suicidas pueden variar de una persona a otra. Los pensamientos suicidas pueden ser muy frecuentes para algunas personas, mientras que para otras pueden ocurrir sólo una o dos veces en la vida.

Algunas personas pueden haber hablado abiertamente de su suicidalidad con sus seres queridos, mientras que otras pueden no habérselo dicho nunca a nadie. Aunque puede haber puntos en común en los pensamientos y acciones que rodean el suicidio, no hay dos personas que pasen por ello de la misma manera.

¡Amigo, Jesucristo soportó todo esto, a fin de que todos sus pecados pudieran ser perdonados! Sepa que cualquier peso de culpa que cargue con usted, Él va a perdonarlo si humildemente lo recibe como su Salvador. "Invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás (Salmos 50:15).

¿Por qué no debería suicidarse? Querido hermano o amigo, Dios está dispuesto a reparar lo que se ha "roto", concretamente, la vida que tiene ahora, la vida que quiere terminar con el suicidio. En Isaías 61:1-3, el profeta escribió: "El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová…a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos… se les de gloria (la corona de la belleza) en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado" (Isaías 61:1-3).

¿Es el suicidio un pecado?

Según la Biblia, el suicidio es generalmente visto como un pecado. Este punto de vista se basa en varios principios bíblicos:

Santidad de la vida: La vida humana se considera sagrada porque los seres humanos han sido creados a imagen de Dios (Génesis 1:27). Este principio implica que quitarse la vida es una violación del orden divino.

Prohibición de matar: El mandamiento "No matarás" (Éxodo 20:13) es interpretado por muchos cristianos en el sentido de que incluye el automatarse.

El cuerpo como templo: El Nuevo Testamento enseña que el cuerpo es templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6:19-20). Por lo tanto, hacerse daño a uno mismo se considera una profanación de este templo.

Aunque estos puntos conforman la perspectiva cristiana tradicional, existen diferentes puntos de vista dentro de la comunidad cristiana, especialmente en lo que respecta a las implicaciones para la salvación y la gracia de Dios.

El suicidio en la Biblia

Siete suicidios y un intento de suicidio están documentados en la Biblia.

Uno de los doce seguidores de Jesús, Judas Iscariote, tiene la narración más conocida. Judas intentó presionar a Jesús traicionándolo porque estaba decepcionado de que Jesús no estableciera un reino terrenal, además en su enojo y frustración lo entrego por dinero a los fariseos. Pero incluso ante el enfrentamiento en Getsemaní, Jesús optó por no luchar. Judas se suicidó ahorcándose tras darse cuenta de que su plan había fracasado y su conciencia por ese acto lo atormento al extremo. (Mt. 27:5). Este si se perdió e ira después del juicio al infierno, ya que como caso único entrego a muerte al hijo de Dios.

La leyenda del rey Saúl es otra historia muy conocida. Tras sufrir graves heridas en combate, pidió a su escudero que le quitara la vida. Saúl se suicidó cuando su escudero se negó (1 Samuel 31:4). El escudero "también cayó sobre su espada y murió con él" (versículo 5) tras presenciar las acciones del rey. El miedo a lo que el enemigo pudiera hacerles impulsaba sus actos.

Hay otras historias de suicidio menos conocidas en la Biblia:

Ahitofel, uno de los consejeros del rey Absalón se ahorcó cuando se dio cuenta de que el rey había desoído su consejo (2 Samuel 17:23).

Después de resultar gravemente herido por una piedra de molino que una dama le arrojó, Abimelec rogó a su escudero que lo asesinara para evitar la vergüenza (Jueces 9:54).

Tras un golpe de estado, Zimri se convirtió en rey. Sin embargo, al ver que sus súbditos no lo aprobaban, entró "en la ciudadela del palacio real e incendió el palacio a su alrededor", quitándose finalmente la vida (1 Reyes 16:18, NVI).

Cuando Sansón entabló combate con el adversario, acabó con su propia vida (Jueces 16:29, 30).

De paso es importante mencionar también la historia de Pablo y Silas, que viajaron a Filipos en respuesta a una visión, donde expulsaron un demonio de una esclava, bautizaron a la poderosa Lidia y fueron sumariamente arrojados a prisión. Esa noche, mientras Pablo y Silas oraban y cantaban, hubo un terremoto que rompió todas las cadenas y abrió todas las puertas. El carcelero "sacó la espada y estaba a punto de suicidarse", creyendo que todos los presos habían escapado, cuando Pablo gritó para asegurarle que no se había escapado ni un solo preso (Hechos 16:25-28). Pablo pudo persuadir al carcelero para que renunciara a sus intenciones de suicidarse y volviera a empezar como seguidor de Cristo.

¿Se va al infierno si uno se suicida?

Esta es una pregunta común dentro de la comunidad. Aunque la interpretación cristiana del suicidio es que es un pecado.  La pregunta "si te suicidas, ¿vas al infierno?" esto provocó múltiples respuestas en algunos medios:

Un usuario menciona: "Lo que manda a una persona al infierno son los pecados no perdonados”. Bueno yo le agregaría una persona del mundo no va al infierno solo por sus pecados no perdonados, la causa principal es porque no se convirtió a Cristo. El suicidio no es bíblicamente más condenable, es pecado y punto. Típicamente no es el fruto de una persona salva, pero es posible que una persona cristiana por causas ajenas o diversas  haya cometido suicidio.  Varios personajes bíblicos salvados se desesperaron de la vida a veces: Pablo (2 Cor 1:8), Jonás (Jonas 4:8), Elías (1Reyes 19:4)" y estos están ya descansando esperando el juicio final para subir al cielo, fueron perdonados.

Otro dice: "El suicidio es un pecado, pero eso no significa que arderás en el infierno por ello, todo depende de que manera te suicidaste y  cual era tu estado espiritual en ese momento.  Esto es a medias, ya que si cometiste suicidio sin haberte entregado a Cristo en vida te perdiste y llegaras allá, ahora si lo hiciste y eras cristiano no llegaras al infierno pero tendrás que dar cuentas de tus actos ante el Tribunal de Cristo, donde será el juicio de los Cristianos(Santos de su Iglesia).  Aunque por regla general es pecado y es algo que Dios no aprueba, porque es transgresión de su palabra, el ordena “no mataras” y eso es autoasecinarce.

Sería cruel condenar a las personas que cometieron o intentaron cometer suicidio. Ninguno de nosotros esta libre de pecado y aun así la mayoría de nosotros seremos salvados a pesar de nuestros pecados por la gracia de Dios, si nos arrepentimos y nos entregamos a su hijo Jesús Cristo antes de morir. Además, no nos corresponde a nosotros juzgar a los demás, sino a Dios, que todo lo sabe, perdona y es misericordioso.

REFERENCIAS EXTERNAS

El artículo "¿Es el suicidio el pecado imperdonable? Understanding Suicide, Stigma, and Salvation through Two Christian Perspectives" de John Potter explora las perspectivas cristianas sobre el suicidio a través de marcos teológicos e históricos. Puesto que los seres humanos han sido creados a imagen de Dios y la vida es sagrada, el cristianismo siempre ha condenado el suicidio como un pecado extremo contra Dios.

El suicidio, según un punto de vista basado en Agustín y Aquino, es un pecado mortal, ya que desobedece el mandamiento de  "No matarás", que incluye el autoasesinato. Según esta perspectiva, el suicidio pone en peligro la salvación del alma porque elimina la posibilidad de arrepentimiento, y esto es así, ya que es aquí en la tierra donde estamos vivos y es donde podemos encontrar de Cristo, al morir se fue de este mundo sin esa posibilidad, ya no hay más chance.   Por otro lado, un punto de vista alternativo destaca el carácter infinito del favor divino. Según esta perspectiva, la bondad de Dios puede extenderse a todos los pecados, incluido el suicidio. Destaca cómo la responsabilidad de una persona puede verse disminuida por una enfermedad mental o una angustia grave, que con frecuencia preceden al suicidio.  Es cierto que Dios en su inmensa misericordia puede perdonar a cualquiera no importa lo que haya hecho, pero ojo solo si se entregó a Cristo su hijo, si te fuiste de este mundo a través del suicidio sin nacer de nuevo, te perdiste.


Noviembre 2025

domingo, 23 de noviembre de 2025

¿ Usted sabe qué es la justificación?

 

¿ Usted sabe qué es la justificación?



Queridos hermanos y estimados lectores, en pocas palabras justificar es declarar justo; hacerlo a uno justo con Dios. La justificación, es Dios declarando justos a aquellos que reciben a Cristo, basándose en que la justicia de Cristo es imputada a la cuenta de aquellos que lo reciben (2 Corintios 5:21). Aunque la justificación, como un principio, se encuentra a través de toda la Escritura, el pasaje más importante que describe la justificación en relación a los creyentes está en Romanos 3:21-26: “Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en Él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que Él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe en Jesús".

Somos justificados, declarados justos, al momento de convertirnos y aceptar a Cristo Jesús como nuestro Salvador, procediendo del Bautismo y agregándonos a la Iglesia. La justificación no nos hace salvos, sino más bien declara nuestra nueva condición como criaturas seguidoras de Cristo y siendo aceptados por la justicia del Dios padre a través o en nombre de su hijo Cristo Jesús. Nuestra justificación procede de poner nuestra fe en la obra consumada de Jesucristo. Su sacrificio cubre nuestro pecado, permitiendo que, a través de Él, Dios nos vea como perfectos y sin culpa. Puesto que somos creyentes en Cristo, Dios ve la propia justicia de Cristo cuando nos mira. Esto satisface las demandas de perfección de Dios; así que, de esta manera, Él nos declara justos – Él nos justifica.

Romanos 5:18-19 lo resume bien: “Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida. Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos”. Otra dice:  “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo” (Romanos 5:1).  Es por la justificación que la paz de Dios puede reinar en nuestras vidas. Es por el HECHO de la justificación, que los creyentes pueden tener la seguridad de la salvación si al final de sus días, mueren victoriosos y firmes. Es el HECHO de la justificación, lo que permite que Dios inicie el proceso de santificación – el proceso de Dios haciendo realidad en nosotros, lo que ya somos posicionalmente.