domingo, 28 de julio de 2024

¿Por qué no debería cometer suicidio?

 ¿Por qué no debería cometer suicidio?

Queridos hermanos en la Fe de Cristo y apreciados lectores, esta es mi oración de hoy; Nuestros corazones están con aquellos que tienen pensamientos de terminar con sus propias vidas a través del suicidio. Si al momento ese es usted, debe experimentar muchas emociones, tales como sentimientos de desesperanza y desesperación. 

Si usted se toma unos pocos minutos y considera permitir que Dios verdaderamente sea Dios en su vida ahora mismo, Él va a probar justamente cuán grande es Él en realidad, "Porque nada hay imposible para Dios" (Lucas 1:37). Tal vez cicatrices de las heridas del pasado, han resultado en un abrumador sentido de rechazo o abandono. Eso puede conducir a la autocompasión, enojo, amargura, deseos de venganza, temores enfermizos que han causado problemas en algunas de sus relaciones más importantes.

¡Amigo, Jesucristo soportó todo el sufrimiento posible, a fin de que todos sus pecados pudieran ser perdonados! Sepa que cualquier peso de culpa que cargue con usted, Él va a perdonarlo si humildemente lo recibe como su Salvador. "Invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás (Salmos 50:15). Nada de que usted alguna vez haya hecho, es demasiado malo como para que Jesús no lo perdone. Algunos de sus siervos escogidos en la biblia cometieron pecados graves, tales como asesinato (Moisés), adulterio (rey David). No obstante, encontraron perdón y una nueva vida abundante en el Señor. "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas" (2 Corintios 5:17).

Dios está dispuesto a reparar lo que se ha "roto",concretamente, la vida que tiene ahora, la vida que quiere terminar con el suicidio. En Isaías 61:1-3, el profeta escribió: "El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová…a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos… se les de gloria (la corona de la belleza) en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado" (Isaías 61:1-3).

Venga a Jesús, y permítale restaurar su gozo y eficacia, mientras confía en Él para comenzar una nueva obra en su vida. Él promete restaurar el gozo que ha perdido y darle un nuevo espíritu para sustentarlo. Su corazón quebrantado es precioso para Él: "Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios" (Salmos 51:12, 15-17).

¿Qué dice la Biblia acerca del suicidio?

La palabra de Dios no usa la palabra suicidio, pero tiene mucho que decir sobre nuestro tema. La Biblia menciona seis personas específicas que cometieron suicidio: Abimelec (Jueces 9:54), Saúl (1 Samuel 31:4), el escudero de Saúl (1 Samuel 31:4-6), Ahitofel(2 Samuel 17:23), Zimri (1 Reyes 16:18), y Judas (Mateo 27:5). Cinco de ellos fueron hombres crueles, malvados, pecadores (no se dice lo suficiente acerca del portador de la armadura de Saúl para juzgar su carácter). Algunos consideran a Sansón como un caso de suicidio (Jueces 16:26-31), pero el objetivo de Sansón era matar a los filisteos, no a sí mismo. La Biblia considera que el suicidio es igual al asesinato – eso es lo que es – asesinarse uno mismo. Dios es quien va a decidir cuándo y cómo va a morir una persona.

 

Según la biblia, el suicidio no es lo que determina si una persona logra entrar al cielo. Si una persona no salva se suicida, no ha hecho nada más que "acelerar" su viaje al infierno. Sin embargo, esa persona que se suicidó estará en el infierno por rechazar la salvación a través de Cristo, no porque se suicidó. ¿Qué dice la biblia acerca de un cristiano que comete suicidio? Yo no creo que un cristiano que comete suicidio pierda la salvación y vaya al infierno. La Biblia enseña que desde el momento en que una persona cree en Cristo verdaderamente, está eternamente segura (Juan 3:16). De acuerdo con la Biblia, los cristianos pueden saber que poseen vida eterna, más allá de cualquier duda, sin importar lo que suceda. "Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios" (1 Juan 5:13). ¡Nada puede separar a un cristiano del amor de Dios! "Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro" (Romanos 8:38-39). Si "ninguna cosa creada" puede separar a un cristiano del amor de Dios, y si incluso un cristiano que comete suicidio es una "cosa creada", entonces ni siquiera el suicidio puede separarlo del amor de Dios. Jesús murió por todos nuestros pecados, y si un verdadero cristiano, en un tiempo de ataque espiritual y debilidad, comete suicidio, ese sería un pecado cubierto por la sangre de Cristo, que aunque si muere victorioso no perderá su salvación, si tendrá que comparecer ante el Tribunal de Cristo y por esta acción tendrá perdida en su galardón.

 

El suicidio sigue siendo un pecado grave contra Dios. De acuerdo con la Biblia, el suicidio es asesinato; siempre está mal

 

¡Amigo, Jesucristo soportó todo el sufrimiento posible, a fin de que todos sus pecados pudieran ser perdonados! Sepa que cualquier peso de culpa que cargue con usted, Él va a perdonarlo si humildemente lo recibe como su Salvador. "Invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás (Salmos 50:15). Nada de que usted alguna vez haya hecho, es demasiado malo como para que Jesús no lo perdone. Algunos de sus siervos escogidos en la biblia cometieron pecados graves, tales como asesinato (Moisés), adulterio (rey David), y abuso físico y emocional (apóstol Pablo). No obstante, encontraron perdón y una nueva vida abundante en el Señor. "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas" (2 Corintios 5:17).

Dios está dispuesto a reparar lo que se ha "roto", concretamente, la vida que tiene ahora, la vida que quiere terminar con el suicidio. En Isaías 61:1-3, el profeta escribió: "El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová…a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos… se les de gloria (la corona de la belleza) en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado" (Isaías 61:1-3).

Venga a Jesús, y permítale restaurar su gozo y eficacia, mientras confía en Él para comenzar una nueva obra en su vida. Él promete restaurar el gozo que ha perdido y darle un nuevo espíritu para sustentarlo. Su corazón quebrantado es precioso para Él: "Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios" (Salmos 51:12, 15-17).

 

¿Aceptaría al Señor como su Salvador y Pastor? Él va a guiar sus pensamientos y pasos, un día a la vez, a través de Su Palabra, la Biblia. "Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos" (Salmos 32:8). "Y reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia, y abundancia de salvación; el temor de Jehová será su tesoro" (Isaías 33:6). En Cristo, todavía va a tener luchas, pero ahora va a tener esperanza. Él es un "amigo más unido que un hermano" (Proverbios 18:24). Que la gracia del Señor Jesús esté con usted en su hora de decisión. Dios les bendiga.

 

Francis Suarez

 

jueves, 25 de julio de 2024

Mirando Al Futuro Filipenses 3:17-21

 

El Futuro  

Filipenses 3:17-21



Lo que nos dice La ley del karma tiene trampa. Los hindúes usan esta palabra sánscrita para hablar de una energía trascendente que se deriva de los actos de las personas. La enseñanza es que cada reencarnación está condicionada por los actos realizados en vidas anteriores, de modo que karma es una ley cósmica de retribución, de causa y efecto. Tus sufrimientos en esta vida pueden atribuirse a tus fallos en una vida anterior.

El problema es que confiar en un destino ciego exime de toda responsabilidad en el presente. Si todo lo que ocurre estaba escrito, entonces pase lo que pase, aquello tenía que ser. Tus impertinencias, tus infidelidades y tus agresiones de hoy no tienen culpa: estaba escrito. Tenía que ser así. Si el horóscopo de la revista ha puesto que hoy tendrás un enfrentamiento con alguien y después una reconciliación, entonces es lo que tiene que ocurrir. No importa el hecho objetivo de que las estrellas no influyan para nada en los sucesos de la vida, así está escrito. No depende de tu buen comportamiento o tus travesuras éticas, es el destino. Nadie queda culpable de nada.

Sin embargo, lo del karma tiene un lado más oscuro. Al proponer que el sufrimiento es secuela de una vida anterior, quiere decir que las víctimas de cualquier tipo de crimen - robo, violación, secuestro, homicidio - son los culpables de ello, porque la desgracia se explica por el comportamiento deficiente en una vida previa. El ladrón o el asesino no tiene la culpa, sólo ha puesto pies y manos a lo que el destino tenía para ti. Si sufres, eres el único culpable y ningún otro.

Filipenses 3:17-21

“Amados hermanos, tomen mi vida como modelo y aprendan de los que siguen nuestro ejemplo. Pues ya les dije varias veces y ahora se los repito de nuevo con lágrimas en los ojos: hay muchos cuya conducta demuestra que son verdaderos enemigos de la cruz de Cristo. Van camino a la destrucción. Su dios es su propio apetito, se jactan de cosas vergonzosas y solo piensan en esta vida terrenal. En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo, donde vive el Señor Jesucristo; y esperamos con mucho anhelo que él regrese como nuestro Salvador. Él tomará nuestro débil cuerpo mortal y lo transformará en un cuerpo glorioso, igual al de él. Lo hará valiéndose del mismo poder con el que pondrá todas las cosas bajo su dominio.”

La visión bíblica de la historia es muy distinta. La historia no se concibe como una serie de ciclos impersonales que se repiten inexorablemente: mueren los viejos, nacen los nuevos, y todo sigue igual. El rey ha muerto, viva el rey. La Palabra de Dios plantea la historia como el despliegue por etapas de un plan eterno. El dibujante del plan es un Dios sabio, poderoso y bondadoso. El plan tiene un comienzo y un fin, y el día a día de ello está en manos del Arquitecto y Constructor. Al mismo tiempo cuenta con las decisiones libres de las voluntades autónomas de criaturas inteligentes. El es soberano, las personas son libres, y de alguna manera Dios incluye su libertad en su plan eterno.

La Biblia dice que Jesucristo es el Cordero inmolado desde antes de la fundación del mundo (Ap 13:8). Dios había previsto la muerte de su Hijo en la cruz, pero Judas libremente decide entregar a Jesús, los sacerdotes a condenarle y los romanos a ejecutarle. Todos los actores en el drama de la pasión toman sus decisiones libremente, pero de alguna manera Dios estaba supervisando todo para que todo cumpliera su voluntad perfectamente: "A éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole" (Hch 2:23).

He aquí la belleza del planteamiento bíblico. La Palabra de Dios asegura que sí, el mundo tal y como lo conocemos llegará a su fin. Dios actuará de forma decisiva para acabar con todo mal: el pecado, el sufrimiento, las guerras y la mismísima muerte. Intervendrá directamente como nunca ha hecho desde los días del diluvio de Noé, mandando juicios escalonados en el tiempo final, con la intención de dar tiempo a todas las personas que quisieran volver a Dios, para luego venir él en la persona del Señor Jesucristo. Cristo volverá al mismo escenario donde una vez fue rechazado y personalmente barrerá todo mal del planeta para establecer un nuevo orden de las cosas. Serán cielos nuevos y tierra nueva, donde morará la justicia y la paz. Será una auténtica edad de oro, un mundo idílico sin ninguna sombra que pudiera empañar la felicidad de todos los que lleguen a ello.

Un componente clave de la vida cristiana es la esperanza del regreso de Jesús. La Biblia describe el cristiano como una persona que está esperando el retorno de su Salvador: "aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan" (He 9:28). Los cristianos son los que "se han convertido de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero, y esperar de los cielos a su Hijo" (1 Ts 1:9-10). Es lo que la Palabra llama la "esperanza bienaventurada" (Tit 2:13).

La visión cristiana del futuro abarca dos aspectos: el fin de tu mundo particular, lo que los teólogos llaman la "escatología personal", y el fin del mundo en general, o "escatología general". En los dos casos, la información bíblica aporta un consuelo enorme. La certeza del desenlace es para el creyente una esperanza bienaventurada.

 

Francis Suarez